Ya
era hora.
Llevo
varios meses quejándome de la actitud dictatorial del presidente del Marín Club
de Fútbol, José Luis Blanco.
Exigiéndole
que convoque una Asamblea General de Socios en la que explique las cuentas de
las temporadas 2011-2012 y 2012-2013.
Ante
esa exigencia, que por escrito envié al club, la respuesta fue una carta
firmada por el mismo, pero sin la firma del Secretario del Club, por lo cual
carece de validez alguna legal, comunicándome mi expulsión como socio del club
la cual, según él, sería refrendada en una asamblea que nunca llegó a convocar.
Intentamos
un grupo de socios formar una candidatura alternativa que una vez configurada y
representada los socios Rubén González, María del Carmen Sanjorge y yo nos
reunimos con él para ofrecerle el relevo al frente del club.
Se
negó en rotundo. Es más se ofreció a dejar el club en febrero de 2014 en manos
de quien quisiera cogerlo con la única condición de que yo no estuviese en esa
Junta Directa.
Como
no convocó, todavía, la Asamblea General de Socios en la que tendría que
presentar las cuentas de las temporadas antes citadas y proponer a la
aceptación de los socios mi expulsión como socio para que fuese aceptada o
rechazada por ellos, no me hizo el carné de socio de esta temporada y por lo
tanto de facto llevó adelante su capricho.
Pero
no sólo eso, sino que rebajó las cuotas de los socios sin permiso de estos,
nombro a su hijo entrenador del primer equipo y desmanteló por completo toda la
cantera del club, prescindiendo de muchos jóvenes y niños de Marín que llevaban
muchos años en el club para rellenar, a duras penas, con gente traída de fuera.
Además
aumentó de manera brutal las cuotas que han de pagar los padres por tener a sus
hijos jugando en el Marín Club de Fútbol, también sin consultarlo con los
socios. Por lo que muchos niños de Marín y del Marín Club de Fútbol o han
tenido que dejar de jugar al fútbol o buscar acomodo en otro club.
Son
ya casi seis meses de quejas y denuncias hechas en este blog sobre su manera
dictatorial de dirigir el Marín Club de Fútbol y además con decisiones
perjudiciales para el club que lo están llevando a la ruina deportiva y
económica, y quizás, de seguir así por mucho más tiempo, a la desaparición.
La
mayoría de los directivos que con él estaban en anteriores juntas directivas lo
han abandonado, la mayoría de los patrocinadores y anunciantes han dejado de
subvencionar al club y gran parte de los socios se han negado a retirar sus
carnés para esta temporada 2013-2014 y ya no digamos el alarmante bajón que ha
sufrido la asistencia de espectadores a los partidos que disputa el equipo en
San Pedro y hasta el nulo acompañamiento de aficionados que tiene el equipo
cuando juega como visitante cuando antes era el equipo que más aficionados propios
llevaba a un campo rival.
Pero
nadie más, hasta ahora, había levantado la voz para protestar, quejarse y
denunciar públicamente todas las atrocidades deportivas, económicas y sociales
que José Luis Blanco está cometiendo al frente del Marín Club de Fútbol.
Por
fin, hoy, ha sido el socio José Ramón Figueroa, quien a través de una carta
pública publicada en las páginas dedicadas a Marín en el Faro de Vigo, ha corroborado
punto por punto las denuncias básicas que yo llevo planteando desde hace casi
seis meses.
Esta
es su carta :
Pero
si querría volver a matizar algunos de los puntos principales en los que basa
nuestra oposición a la gestión de José Luis Blanco.
Una
es la de la deuda que arrastra el club y que no son sólo esos 15.000 euros que
se perdieron en tiempos en los que el Sr. Lalo era el secretario, sino que hay
que unir a ellos los 6.000 euros que faltaron de la oficina del club, los
15.000 euros por los que fue denunciado por los jugadores de la temporada
2011-2012 y condenado a pagar por el juez, la deuda que se tiene con los
jugadores de la temporada 2012-2013 y sabe Dios cuantos pufos más.
Y
otro es en cuanto a la rebaja de los carnés, cierto que a los jubilados y a las
señoras se les rebajó de 40 a 30 euros, una rebaja que quizás propuesta a los
socios hubiera sido aprobada dado el descenso de división del primer equipo y
la situación económica que atraviesa el país. Pero es que a los socios
caballeros también se les rebajo, pero de los 60 euros que pagaban, también a
30 euros, y los socios especiales de 80 también han desaparecido. Y además está
el aumento de las cuotas a los niños de la cantera de 120 euros a 250 euros.
Quizás
haya llegado el momento en que los socios, aficionados y seguidores del Marín
Club de Fútbol se hayan cansado de la actitud dictatorial del José Luis Blanco
y comiencen a reclamar para si lo que siempre ha sido suyo, el Marín Club de
Fútbol.